La Propaganda de los Medios y de los Demócratas tiene y debe ser confrontada. No es tiempo de callar, es tiempo de hablar y actuar

Una encuesta reciente encontró que la mitad de varones demócratas debajo de los 50 años cree que es aceptable el asesinar a oponentes políticosCuarenta y cuatro por ciento (44%) de varones demócratas menores de 50 años encuestados por el organismo liberal Southern Poverty Law Center (SPLC) aprobaron el “asesinar a un político que le esté haciendo daño al país o a nuestra democracia”. Esta es la cifra más alta encontrada entre género, partido y edad combinadas.Una mayoría sencilla desaprobaba tal acción y un porcentaje bien pequeño contestó que “no sabía”. La encuesta fue publicada el 1 de junio en donde se divulgaron los resultados obtenidos de personas entrevistadas en el 18 y el 25 de abril. Fueron encuestadas 1,500 americanos. La encuesta tiene un margen de error de 2.53%.De acuerdo a la encuesta, americanos mayores de 50 años, tanto hombres como mujeres de ambos partidos nacionales estaban dramáticamente en contra del asesinato de rivales políticos.Los resultados de la encuestas volvieron a resurgir esta semana a raíz de la noticia del joven californiano que fue arrestado por la autoridades en las inmediaciones del vecindario donde vive el Juez del Tribunal Supremo de los Estaos Unidos Brett Kavanaugh. El hombre fue detenido con un arma de fuego en su poder y se alega que pretendía entrar a la casa del juez con el propósito de asesinarlo. Fue acusado por intento de asesinato.La retórica inflamatoria de medios de comunicación y de activistas de partidos políticos tiene que ser denunciada y confrontada. Fallar en hacer eso es abrirle las puertas de par en par a una violencia que puede llegar a escalar rápida y peligrosamente.Hace unos años atrás (2017) un varón armado abrió fuego en una práctica de un juego de baseball en donde participaban legisladores republicanos. El que perpetró el acto de violencia le dijo a los medios que él fue allí con la intención de matar a la mayor cantidad de republicanos que pudiera.¿Qué hicieron los medios liberales? Lo que hacen siempre, cubrir selectivamente la noticia de acuerdo a sus intereses político-partidistas. Hay una realidad innegable que no se puede seguir ni ocultando, ni callando. Los propios medios cargan su grado de responsabilidad, pues son los mismos que en la mayoría de sus coberturas presentan a los republicanos y a los conservadores como gente odiosa, peligrosa, fanática, prejuiciada, nazista, etc, etc., etc.El intento de atentar contra la vida de un juez conservador del Supremo Federal es un fruto de esa peligrosa propaganda. Los números en el Partido Republicano, entre varones y mujeres contestando la misma pregunta del inicio, aunque menores en porcentaje, no dejan de ser preocupantes.Los medios de comunicación masiva en Puerto Rico también tienen el mismo discurso abrasivo en contra del sector conservador. Estas narrativas de el sector de la izquierda radical del país, recitadas ad verbatim por algunos medios del país tienen que ser confrontadas vigorosamente . Una de ellas es el intento de presentar a la gente religiosa, conservadora o pro vida como “amenazas a la democracia”. En la medida en que se van polarizando extremos en las luchas culturales es irresponsable el seguir permitiéndole a los medios la imposición de etiquetas. Eso no quiere decir que activistas y medios van a dejar atrás su retórica, NO, la continuarán, El problema es cuando la crítica al conservadurismo o a la religión se llega a convertir en la norma por el silencio de esos sectores etiquetados. Algunos me han dicho: “Milton es mejor dar la otra mejilla”, otros me han dicho a través de los años: “Milton, eso es profético, la Biblia dice que eso iba a pasar como quiera, porque no mejor dejar que pase, para que se siga acelerando la profecía bíblica”. Si hubiera hecho eso, y no hubiésemos activados campañas contra la pornografía y otros vicios, hoy en día la pornografía y la prostitución estuvieran legalizadas con todas las consecuencias que eso hubiera acarreado. Lo mismo ocurre con la democracia, la cuidamos o la perdemos. Nunca le hemos temido a la persecución por causa de la justicia. Padecer en medio de un regimen totalitario, ateo, es algo que viven miles y miles de personas alrededor del mundo hoy en día. Terminar perseguidos en una democracia, es tan absurdo. Perder derechos por no atrevernos a confrontar a las fuerzas de las tinieblas, sus agentes y sus ideas, es patético.La pregunta que hizo el organismo liberal y que fue contestada por gente partidista menor de 70 años es perturbadora. Nos muestra la diferencia entre las generaciones y nos da un adelanto de lo que podría ser la vida en los Estados Unidos y en Puerto Rico en la próximas décadas. Sin lugar a dudas las ideas siguen teniendo consecuencias. Las buenas ideas se aplauden, las malas hay que desenmascararlas. Callar en un tiempo como este, no es opción, es ignorancia y/o cobardía.