¿QUE TEMAS TOCAREMOS HOY?
LAS EXPRESIONES DE LA REPRESENTANTE LISIE BURGOS,
LA DESINFORMACIÓN DE LA PRENSA,
LA CAMPAñA DE TERROR Y ODIO HACIA PROYECTO DIGNIDAD
LA TEORIA DE LOS ADULTOS CONSIENTES Y LA PELIGROSIDAD DE EXPONER LA INTIMIDAD
NOT DEL AUTOR: TENGO EL DEFECTO DE ESCRIBIR MUCHO EN MEDIO DE UNA SOCIEDD QUE CASI NO LEE. POR ESO LO DE TODO UN POQUITO, VARIAS HISTORIAS DOS O TRES TEMAS, LEA EL DE SU INTERÉS Y NO SE OLVIDE COMENTAR Y COMPARTIR.
Las expresiones de la Representante Lisie Burgos, que recibieron desde el día de ayer una prominencia por todos los medios, es una muestra más de una parte del periodismo sensacionalista, poco inteligente y de cuneta que tiene el país.
La Rep. Burgos trae a colación como parte de la discusión de un proyecto de ley, entre algunas cosas, la realidad de lo que ocurre en el los tribunales con muchísima frecuencia con la percepción de jueces en relación a cómo visten las personas que comparecen a sus salas. El simple hecho de que se toque el tema de la mujer sin tener en consideración el discurso políticamente correcto y oficialista de los grupos activistas es pecado capital para algunos periodistas. Trata la prensa de crear un issue donde no lo hay. Todo el que está relacionado con la práctica legal y comparece con un cliente a una vista judicial sabe el cómo se orienta a esa ciudadano a vestirse y proyectarse el día de la vista. Lo que la representante comentó ya ha sido objeto de discusión en el campo legal. Lo mismo también ocurre con cualquier otra declaración siguiendo ese mismo razonamiento.
Ahora bien, declaraciones como las emitidas por la Representante Lisie Burgos hizo que los representantes de los medios de comunicación salieran corriendo de la vista pública y tal parece que algunos ni siquiera esperaron a llegar a redacción, inmediatamente empezaron a correr los tweets, los adelantos noticiosos y toda la verborrea que puede salir de la cabeza de activistas vestidos de periodistas o de un titulista de un periódico cuando huele sangre y venta: ”Qué si la representante dijo”, “Qué si la representante cree” “Bla, bla, bla”.
De ahí el discurso se tornó en las redes a los peligros que representan las legisladoras del Proyecto Dignidad a la democracia del país. Reclaman los medios escandalizados ¡Cuidado! Por ahí vienen los fundamentalistas y los religiosos a tomar por asalto la Legislatura, y quién sabe si al propio Estado.
24 horas de titulares sensacionalistas de algunos de algunos medios del país, en donde periodistas aterrorizados sonaban la alarma de peligro. ¿Qué ocurre cuando la gente promedio lee o escucha estos tipos de titulares? La mente intenta desarrollar un retrato de la situación: miles de tropas marchando, desfiles marciales, gente invadiendo el Capitolio, desenfundando armas, etc. Otro retrato mental podía ser el ver fundamentalistas religiosos, como los del fenecido Ayatolah Komeini o del gobierno Taliban, tapando a las mujeres de pies a cabeza con solo un orificio para ver sus ojos, a activistas conservadores trepando los muros y paredes de la universidad y en otro caso, periodistas, profesores y analistas siendo colocados en instrumentos y cámaras de tortura de la infame Inquisición. En broma y en serio.
En otras palabras, las coberturas mediáticas prejuiciadas e inflamatorias no tienen otro objetivo que no sean el evocar respuestas anti-intelectuales y puramente emocionales. Es la metodología empleada en una canción de los Beatles, que decía: “Yellow mellow custard, dripping from a dead dog’s eye”. No he visto al día de hoy ningún significado intelectual en esa letra, pero la frase evoca una respuesta emocional de repulsión, que aparentemente era el efecto deseado. Eso se llega a traducir en un pensamiento en algunas personas: “Yo no se por que las legisladoras de Proyecto Dignidad me caen mal, lo único que se es que me caen mal”. Técnicas típicas de la propaganda nazi. Absolutamente brillante, pero asqueroso –utilizar bazofia sin sentido para que las imaginaciones de las gentes corran sin control—todo con el objetivo de hacer que las personas se comporten y piensen igual que los perros de Pavlov, salivando o vomitando al escuchar el ruido más leve de una campana: valores conservadores o religiosos es igual a malo. Los conservadores se constituyen en la peor plaga y amenaza de este siglo.
Le da escalofrío a muchos el pensar en lo que podría ocurrir en el 2024, con candidatos que hablen la verdad sin temor, de gente que practique lo que predica, que vaya a la Legislatura y presente todos los proyectos que tenía y tiene Proyecto Dignidad en su plataforma política. Eso asusta a muchos, porque todos saben del deterioro horrendo que hay en los dos partidos mayoritarios……….
……. Otra cosa, y no menos importante, a este pueblo no le gustan los abusos de poder. Y ahí gente en las estratas de poder en este país que quieren hacer desaparecer al Proyecto Dignidad, junto con sus funcionarias electas. Equivocadamente piensan que montando una campaña continua de miedo y de odio contra la Senadora Joanne Rodríguez Veve y la Representante Lisie Burgos lograrán su cometido. ¡Qué equivocados están! Están logrando justamente lo contrario. Así que a los detractores, les decimos: “Sigan con su campaña de odio, porque han logrado activar a decenas y decenas de miles de electores, por encima de los 87, 379 votos que Proyecto Dignidad llevó a las urnas”. Para sorpresa de muchos, desgracia de otros y noticia positiva par el movimiento conservador, cada día llegan más jóvenes, atraídos por un mensaje de esperanza, de transparencia y de credibilidad. La ejecutoria a la fecha de hoy de las legisladoras de Proyecto Dignidad, les ha brindado la confianza a muchos de que todavía Puerto Rico se puede volver a poner sobre sus pies después del saqueo y pillaje al que ha sido sometido a través de su historia……
……… Pero hablando de algunas de las cosas que han publicado los medios y la reacción visceral de algunos ignorantes a tweets y declaraciones de líderes pro familia, que alegan con muchísima razón que la propia prensa que quiere hacer de este issue un escándalo nacional, en defensa de mujeres que son víctimas, son los mismos que se las pasan alabando y glorificando a artistas como Bad Bunny. Ninguno de los periodistas que se prestan para la faena contra la Representante Lisie Burgos habla de la cosificación y la explotación sexual de la figura de la mujer, su degradación y del mensaje equivocado que esto le lleva a una generación completa. De la manera en que un hombre vea a una mujer, de esa misma forma la tratará. Si la ve como una igual a sí mismo, la tratará con el mismo respeto, valía y dignidad que espera para el mismo. Si la ve como un instrumento se cual, como una cosa, así la tratará. Esa es la semilla de la violencia contra la mujer y ¡que muchas semillas se siembran de esa en nuestra cultura! Alguien dijo una vez con muchísima razón: “que a las personas se aman, y las cosas se utilizan”. Invertir ese pensamiento le ha traído consecuencias funestas a la sociedad actual……..
……. Leía una reacción repetitiva de gente que entra a un hilo de conversación en Tweeter y repite la ignorancia de que una obscenidad adquiere inmunidad constitucional porque se le presente a adultos que vayan a un lugar y voluntariamente paguen por exponerse a obscenidades. Eso es absurdo y así lo decidió el Tribunal Supremo de los Estados Unidos, cuando en un caso determinó: “Categóricamente rechazamos la teoría de que las películas obscenas adquieren inmunidad constitucional contra las regulaciones estatales simplemente porque sean exhibidas a adultos que consientan en verlas”. Siguen diciendo los jueces del Supremo Federal: “Otros intereses aparte de los que tienen los defendidos, están involucrados. Esto incluye el interés público en la calidad de la vida, en el ambiente total de la comunidad, el tono del comercio y posiblemente la misma seguridad pública”. Así es que la próxima vez que escuche a alguien esgrimiendo la teoría de los adultos que consienten, repítale lo que ya ha decido el Supremo……..
………. En relación a la vestimenta, y la mujer, o los hombres, o personas jóvenes y hasta menores de edad y su riesgo, se pueden decir varias cosas. Las mismas, en el día de hoy, caen en la categoría de lo políticamente incorrecto. Pero la realidad es que no dejan de ser verdades que se tienen que decir, de las que se tienen que hablar.
Hay una disciplina, la la proxemica, que estudia y enseña que la manera en que usamos nuestros espacios es crítico para nuestra supervivencia. La gente normal no se quita la ropa en medio de la calle, ni se expone ante extraños y la razón es clara, te pueden matar, violar o hacerte visitar una institución de salud mental. La gente se vuelve extremadamente vulnerable cuando expone públicamente su desnudez. Por eso históricamente la gente sensata ha protegido su intimidad. Ahora bien, la sociedad y nuestra cultura actual, a través de la aceptación de las diferentes variantes de la pornografía ha ido destruyendo ese concepto de privacidad, y no solo lo destruye sino que tampoco quiere aceptar la consecuencia de violentar conductas de sana convivencia. Medio mundo quiere jugar o representar el papel de víctima hoy.
Hace años atrás una autora e investigadora, Pamela Paul, escribió un libro titulado “Pornified” (Pornificados, o en una traducción más liberal, Llenos a Saturados de Pornografía).
Dondequiera que encontró una cultura saturada de pornografía, vio lo mismo: conductas que hace 30 años atrás eran totalmente inaceptables se habían convertido en conductas parcialmente normales. Entre muchas características encontró las siguientes, y quiero que mientras las lee, piense si eso no ocurre en nuestro país hoy:
1. Jovencitas sexualizándose para impresionar a otros jóvenes.
2. Jóvenes obsesionados con estrellas porno.
3. Gente que prefiere vivir en la fantasía y no en la realidad.
4. Gente desconectando la sexualidad de la intimidad, siendo más propensos a manifestar despliegues de sexualidad pública.
5. Gente que todo lo relaciona con sexo.
6. Gente que fantasea sexualmente con todo el que conoce.
¿CUÁLES SON LOS EFECTOS DE VIVIR ASÍ?
A través de investigaciones estadísticas extensas y de cientos de entrevistas, la autora arriba mencionada encontró los siguientes efectos:
1. Los usuarios frecuentes de pornografía son menos felices en sus relaciones.
2. Más propensos a sufrir problemas de impotencia a corto y largo plazo.
3. Más inclinados a participar en actividades sexuales riesgosas o ilegales.
4. Más infelices con sus parejas y consigo mismos.
5. Más propenso a dejarse arrastrar por fantasías sexuales que han progresado a la violencia y a la conducta criminal.
Las formas de pensar tienen consecuencias, pero vivimos en una sociedad que NO quiere escuchar la VERDAD.